El éxito de la cirugía en niños con enfermedad hepatobiliar es inversamente proporcional a la edad a la que se realiza la intervención. El principal indicador de una obstrucción biliar son las heces de color pálido, pero hace falta saber reconocerlas. Este estudio evalúa la capacidad de los profesionales sanitarios para reconocer las heces pálidas. Para ello, pediatras que estaban en contacto con bebés que padecían ictericia vieron fotos de heces infantiles normales, acólicas e indeterminadas. Cada deposición fue clasificada como «sana» o «sospechosa». Un tercio de las heces no fueron identificadas correctamente por los médicos y enfermeras, pudiendo deducirse que los profesionales experimentados a menudo no reconocen el color de las heces asociadas a una obstrucción. Se propone el uso de tarjetas con el color de las heces, similares a las que se usan en Japón o Taiwán, para mejorar la detección temprana de las patologías hepatobiliares con un coste mínimo.
Bakshi B, Sutcliffe A, Akindolie M, et al. Arch Dis Child Fetal Neonatal Ed. 2012 Sep;97(5):F385-7
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