Etiqueta: Reumatología

Evaluando el dolor articular

Evaluando el dolor articular

Introducción

El dolor articular es una manifestación clínica encontrada con frecuencia en la práctica clínica. La artritis inflamatoria es un término común para una serie de condiciones que se manifiestan como dolor articular, inflamación y rigidez. Estas pueden ser ampliamente clasificadas en:

  • Artritis infecciosa
  • Artritis mediada inmunológicamente
  • Artritis inflamatoria no infecciosa y no mediada inmunológicamente
  • Artritis paraneoplásica
  • Artritis neoplásica

Definiendo el Dolor Articular

La inflamación de las articulaciones no es la única causa de dolor en las articulaciones. Además de las enfermedades inflamatorias, el dolor también puede ser debido a daños en las articulaciones (por ejemplo, la osteoartritis, o trauma conduce a una fractura o anormalidad interna), dolor referido, o una alteración del umbral del dolor (como se ve en los síndromes de sensibilización central, como la fibromialgia).

El dolor debido a una patología intra-articular debe ser diferenciada de dolor referido que surge de los tejidos blandos adyacentes o hueso yuxta-articular. En el contexto del dolor referido, el rango de movimiento de la articulación generalmente no está afectado, y el movimiento de la articulación no agrava el dolor, mientras que la palpación de una bursa regional, tendón o ligamento puede provocar dolor.

Características de la Inflamación Articular

Los signos clásicos de la inflamación generalmente pueden ser aplicados a la inflamación articular:

  • Dolor: Que se exacerba al movimiento.
  • Eritema
  • Calor
  • Hinchazón
  • Rigidez
  • Limitación de los arcos de movilidad

Normalmente, no es posible detectar todas las características anteriores (especialmente la hinchazón y eritema) en articulaciones profundas como los hombros, las caderas, las articulaciones intervertebrales y las articulaciones sacroilíacas.

Monoartritis VS Poliartritis

La mayoría de las causas de oligoartritis (que involucran de 2-4 articulaciones) o poliartritis (que implica ≥ 5 articulaciones) también pueden ser causas de monoartritis, ya que casi cualquier condición artrítica inicialmente puede afectar a una sola articulación.

La condición más importante y grave que debe ser considerada cuando existe monoartritis es la de origen piogeno.

En cuanto a las causas de oligo y poliartritis, se encuentran:

  • Artritis viral
  • Artritis postinfecciosa o reactiva
  • Fibromialgia
  • Múltiples sitios de bursitis o tendinitis
  • Anormalidades del tejido blando
  • Hipotiroidismo
  • Dolor neuropático
  • Enfermedad ósea metabólica
  • Depresión

Etiología

La etiología de la artritis inflamatoria es variada y se puede agrupar en las siguientes categorías amplias: artritis infecciosa, artritis inmunomediada, artritis inflamatoria no infecciosa y no inmune mediada, artritis paraneoplásicos, y artritis neoplásica.

Infecciosa

De manera práctica, una sola articulación inflamada se debe a artritis séptica hasta que se demuestre lo contrario. Es, con mucho, la causa más grave de monoartritis aguda.

  • Gonococcica
  • Tuberculosa
  • Enfermedad de Lyme
  • Parvovirus B19
  • Otras infecciones víricas: rubéola, Ebstein Barr, hepatitis B y C, e infección por VIH.

Inmunitarias

  • Artritis reumatoide
  • Fiebre Reumática
  • Lupus
  • Síndrome de Sjögren
  • Esclerodermia
  • Enfermedad de Behcet
  • Púrpura de Henoch-Schonlein, vasculitis sistémica
  • Síndrome anti-sintetasa
  • Artritis reactiva

Artritis inflamatoria no infecciosa y no inmunitaria

  • Osteoartritis
  • Gota
  • Pseudogota

Paraneoplásica

  • Osteoartropatía hipertrófica.

Neoplásica

  • Sarcoma sinovial

Evaluación del Dolor Articular

Exploraciones complementarias

Bioquímica

Entre las exploraciones complementarias analíticas la más útil es el análisis del líquido sinovial. Las pruebas analíticas de sangre tienen utilidad en el estudio de las artropatías inflamatorias, pero no darán información útil en las patologías degenerativas salvo en los pocos casos en que se estudie específicamente la causa de una artropatía degenerativa con características de secundaria, como la hemocromatosis.

Imagen

La radiografías son muy útiles para confirmar procesos sospechados clínicamente como la artrosis o para observar da- tos radiológicos específicos como la calcificación meniscal o del cartílago en la condrocalcinosis, pero su interpretación siempre se debe realizar en relación con la clínica. Por otra parte muchas causas de dolor en la rodilla como la patología intraarticular mecánica, la fase inicial de una osteocondritis disecante, una artritis reumatoide o una artritis séptica no se verá en las radiografías. La RM es insustituible para el diagnóstico de procesos mecánicos como la osteocondritis disecante o la patología intraarticular mecánica y puede poner de manifiesto una osteomielitis o un tumor periarticular que no se haya observado en la radiografía, y puede dar la clave para el diagnóstico de procesos poco frecuentes como la sinovitis villonodular pigmentada. Sin embargo sus resultados, como los de la radiografía, deben ser puestos en relación con la clí- nica y el estudio de líquido sinovial. Observar signos de ar- trosis y lesiones meniscales en la RM es frecuente y no implica que sean la causa de la clínica. La RM no diferenciará si la causa de una rodilla inflamada es por una lesión meniscal, aunque esté presente, o por una artritis psoriásica o cualquier otra artropatía inflamatoria; tampoco será capaz de decirnos cuál es la causa más importante del dolor cuando haya gonartrosis y tendinitis anserina. La utilidad más importante de la ecografía en la gonalgia está en la confirmación de la presencia de derrame articular cuando hay dudas en la ex- ploración, y sobre todo en el estudio del hueco poplíteo.


Rx Artritis Reumatoide


Tofos: Gota


Nódulos Reumatoideos


Monoartrosis aguda de rodilla derecha

Referencias

«Assessment of inflamed joint – BMJ Best Practice.» 2010. 31 Oct. 2014 <http://bestpractice.bmj.com/best-practice/monograph/1191.html>